Todavía es frecuente escuchar que a alguien le han vendido una enciclopedia o un colchón en su propia casa. Suelen ser personas de cierta edad o con facultades limitadas las víctimas de los comerciales que se dedican a la práctica de este tipo de ventas. A continuación, vamos a analizar cómo se producen y cómo reaccionar ante ellas.
¿Qué se consideran contratos fuera de establecimiento mercantil?
- Los celebrados con la presencia física simultánea de ambas partes en un lugar distinto del establecimiento, como ocurre con las ventas a domicilio.
- Aquellos en los que la persona consumidora y usuaria ha realizado una oferta en un lugar distinto del establecimiento.
- Los celebrados en el establecimiento o mediante un medio de comunicación a distancia inmediatamente después de que haya existido contacto personal e individual con la persona consumidora y usuaria en un lugar distinto al establecimiento mercantil con la presencia física simultánea de ambas partes.
- Los celebrados durante una excursión organizada para promocionar y vender productos o servicios.
¿Cómo deben ser las comunicaciones comerciales a distancia?
- Debe constar inequívocamente su carácter comercial.
- Si te llaman por teléfono, te deben precisar explícita y claramente, al inicio de la conversación, la identidad de la empresa y la finalidad comercial de la comunicación. No pueden llamarte desde las 21.00 horas hasta las 9.00 horas ni en festivos o en fines de semana.
- Si quieren utilizar un sistema automatizado de llamadas sin intervención humana o un telefax, necesitan tu consentimiento expreso previo.
- Tienes derecho a oponerte a recibir ofertas comerciales no deseadas por teléfono, fax u otros medios de comunicación equivalentes.
- Si te llaman por teléfono, deben hacerlo desde un número identificable.
- Deben cumplir la normativa sobre protección de menores, respeto a la intimidad y protección de datos de carácter personal.
¿Qué información deben proporcionarme antes de la celebración del contrato?
La empresa debe facilitarte, de forma clara y comprensible, la siguiente información precontractual:
- Características principales de los bienes o servicios.
- Datos de la empresa: identidad, nombre comercial, dirección completa, número de teléfono y fax, y correo electrónico. El objeto es asegurar una comunicación rápida y eficaz.
- Dirección para remitir las reclamaciones, si es diferente a la anterior.
- Precio total, incluidos los impuestos y tasas.
- Si existen gastos adicionales -como de transporte, de entrega o postales-, debe incluirlos todos.
- Los procedimientos de pago, entrega y realización del servicio; la fecha en que la empresa se compromete a entregar los bienes o a prestar el servicio. Si procede, el sistema de tratamiento de las reclamaciones.
- Si existe un derecho de desistimiento, debe informarte sobre las condiciones, el plazo, los procedimientos para ejercerlo y el modelo de formulario. En los casos en los que el desistimiento conlleve un coste de devolución, debe informarte de ello. Si no lo hace, no tendrás que pagarlos. Si no existe derecho de desistimiento o si este puede perderse por alguna circunstancia, indicación de este extremo.
- Recordatorio de la existencia de una garantía legal de conformidad con los bienes.
- Si procede, la existencia de asistencia posventa, servicios posventa y garantías comerciales, así como sus condiciones.
- La existencia de códigos de conducta.
- La duración del contrato.
- Cuando proceda, la duración mínima de las obligaciones que asumes, derivadas del contrato.
- Si procede, la existencia y las condiciones de los depósitos u otras garantías financieras que debes pagar o aportar a solicitud de la empresa.
Cuando proceda, la posibilidad de recurrir a un sistema extrajudicial de reclamación y los métodos para acceder a él.
Sin embargo, el plazo se amplía en doce meses si la empresa, en el momento de trasladarte la información precontractual, no te explicó el contenido del derecho de desistimiento.
Si en esos doce meses la empresa sí te ilustra sobre tus derechos, el plazo será de 14 días naturales contados a partir de la fecha en la que recibas la información.
Si ejercitas el derecho de desistimiento, la empresa debe reembolsarte todos los pagos que hayas realizado (incluidos, en su caso, los costes de entrega) sin demoras indebidas y, en cualquier caso, antes de que hayan transcurrido 14 días naturales desde la fecha en que recibió tu declaración de desistimiento. Sin embargo, si elegiste una modalidad de entrega diferente a la menos costosa ofrecida por la empresa, esta no estará obligada a satisfacerte esos gastos adicionales.
Si te encuentras ante esta situación, ten en cuenta las siguientes recomendaciones:
- No compres de forma impulsiva.
- Es recomendable comprar a comerciantes que vendan en zonas fijas o con cierta periodicidad, ya que siempre será más fácil la mediación si surge un problema.
- Antes de firmar el contrato, asegúrate de que el producto cumple con las condiciones descritas.
- Lee bien el contrato antes de firmarlo.
- No te fíes si en el contrato solo consta como dirección postal un apartado de correos.
- Comprueba quién deberá afrontar los gastos de envío.
- Adopta una actitud crítica y racional ante la publicidad y la propaganda sobre productos milagro.
- En las ventas a domicilio, asegúrate de la identidad de la persona vendedora.
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